DOMINIOS DEL PLASMALEMA DEL HEPATOCITO

Los hepatocitos están distribuidos de manera que cada célula no sólo hace contacto con otras células, sino que además bordean a un espacio de Disse. Por tanto, se dice que el plasmalema de los hepatocitos tiene dominios laterales y dominios sinusoidales.

DOMINIOS LATERALES. Los dominios laterales de la membrana del hepatocito forman espacios intercelulares laberínticos de 1 a 2 µm de diámetro que se llaman canalículos biliares, que conducen a la bilis entre los hepatocitos hacia la periferia de los lobulillos clásicos (18-8eC). Se previene la fuga al formarse fascias ocluyentes entre células hepáticas vecinas, lo que aisla a los canalículos biliares del espacio extracelular restante.

Se proyectan microvellosidades cortas y ciegas desde el plasmalema del hepatocito hacia los canalículos biliares, lo que incrementa las áreas de superficie por las que se secreta la bilis (18-13e). Los centros de actina de estas microvellosidades se entrelazan con la red engrosada de filamentos de actina e intermedios que refuerzan la región del plasmalema del hepatocito, y que participan en la formación de los canalículos biliares.

Las membranas celulares que forman las paredes de los canalículos biliares ponen de manifiesto concentraciones elevadas de ATPasa de Na y K y adenilatociclasa. Los dominios laterales tienen también uniones comunicantes o de intersticio aisladas, por medio de los cuales los hepatocitos se comunican entre sí.

DOMINIOS SINUSOIDALES. Los dominios sinusoidales de las membranas plasmáticas del hepatocito tiene también microvellosidades que se proyectan hacia el espacio de Disse (18-12t y 18-13e). Se ha calculado que estas microvellosidades incrementan el área de superficie del dominio sinusoidal, por un factor de 6, lo que facilita el intercambio de materiales entre el hepatocito y el plasma en el espacio perisinusoidal. Esta membrana plasmatica es rica en receptores de manosa-6-fosfato, ATPasa y de Na y K, y adenilatociclasa, por que es aquí en donde se descargan las secreciones endocrinas del hepatocito que entran en la sangre sinusoidal, y el material que se encuentra en la sangre se transporta hacia el citoplasma del hepatocito.

ORGANITOS E INCLUSIONES DE LOS HEPATOCITOS

Cerca de 75% de los hepatocitos tienen un solo núcleo, y los restantes tienen dos. Los núcleos varían de tamaño, pues los más pequeños (cerca del 50% del total) son diploides, y los de mayor tamaño son poliploides; estos últimos núcleos llegan a alcanzar una poliploidia de 64 N.

Los hepatocitos sintetizan activamente proteínas para su propio consumo lo mismo que para exportación. Por tanto tienen ribosomas, RER y aparato de Golgi abundantes (18-14t y 18-15t). Cada célula alberga varios juegos de aparatos de Golgi, localizados preferentemente en la vecindad de los canalículos biliares.

A causa de las grandes necesidades energéticas de los hepatocitos, cada célula contiene hasta 2,000 mitocondrias. Las células cercanas a la vena central (zona tres del acino hepático) tiene casi el doble de mitocondrias, aunque considerablemente más pequeñas, que los hepatocitos del área periportal (zona 1 del acino hepático). Las células hepáticas tiene también un complemento rico de endosomas, lisosomas, y peroxisomas.

El complemento de retículo endoplásmico liso (REL) de los hepatocitos varía no sólo según la región, sino también la función. Las células de la zona 3 del acino hepático tienen una dotación mucho más rica de REL que las del área periportal. Mas aun, la presencia de ciertos fármacos y toxinas en la sangre induce e incrementa el contenido de REL de las células hepáticas, porque ocurre destoxicación de las cisternas de este organito.

Los hepatocitos contienen cantidades variables de inclusiones en forma de gotitas de lípidos y glucógeno (18-16t). Las gotitas de lípidos son principalmente de lipoproteínas de muy baja densidad, y son especialmente prominentes después del consumo de una comida grasosa.