CORRELACIONES CLÍNICAS

El epitelio respiratorio de personas crónicamente expuestas a irritantes como el humo del tabaco y el polvo del carbón experimentan alteraciones reversibles conocidas como metaplasia, y contiene más células caliciformes que células ciliadas. El aumento en el número de las células mucoproductoras tiene como resultado una capa más gruesa de moco para remover los irritantes, pero la reducción en el número de células ciliadas retarda la velocidad de eliminación del moco, lo que produce como resultado congestión. Más aún, las glándulas de la lámina propia (o propria) y las submucosas aumentan de tamaño, lo que tiene como consecuencia secreción más abundante. Unos meses después de la eliminación del irritante, la relación entre las células (1:1) vuelve a la normalidad y las glándulas seromucosas readoptan su tamaño previo.

Árbol Bronquial

El árbol bronquial se inicia en la bifurcación de la tráquea como un bronquio derecho y otro izquierdo que se dividen, progresivamente, en ramificaciones cuyo diámetro va disminuyendo gradualmente. El árbol bronquial está constituido por vías aéreas localizadas fuera del parénquima pulmonar (bronquios primarios, bronquios extrapulmonares) y otras ubicadas en el tejido pulmonar: bronquios intrapulmonares (bronquios secundarios y terciarios), bronquiolos, bronquiolos terminales y bronquiolos respiratorios (fig. 15-7e). Conforme la vías aéreas decrecen progresivamente de tamaño, también se aprecian algunas otras modificaciones, como disminución en la cantidad de cartílago, glándulas y células mucoproductoras, y en la altura del epitelio, con aumento en la cantidad de músculo liso y de tejido elástico (esto último relacionado con el grosor de la pared bronquial).