Los cortes rebajados o lijados, que constituyen el otro método para preparar los cortes de hueso para su estudio, consiste en aserrar el hueso en rebanadas delgadas, a lo que sigue rebajamiento o lijado de los cortes con abrasivos entre láminas de vidrio. Cuando el corte es suficientemente delgado para su estudio con microscopio de luz, se monta de la manera adecuada. Cada sistema tiene sus desventajas: en los cortes descalcificados los osteocitos se deforman a causa del baño ácido descalcificante; en los cortes lijados las células se destruyen, y las lagunas y los canalículos quedan llenos de desechos óseos.

Matriz ósea

La matriz ósea tiene componentes orgánicos e inorgánicos.

Componentes inorgánicos

La porción inorgánica del hueso, que constituye cerca del 65% de su peso seco, está compuesta principalmente por calcio y fósforo, junto con otros componentes como bicarbonato, citrato, magnesio, sodio y potasio. Calcio y fósforo existen primordialmente en forma de cristales de hidroxiapatita, [Ca10(PO4)6(OH)2] pero también hay fosfato de calcio en forma amorfa. Los cristales de hidroxiapatita (40nm de longitud por 25nm de anchura y 1.5 a 3 nm de espesor) están distribuidos de manera ordenada a lo largo de las fibras de colágena del tipo I; se depositan en las regiones de brecha de la colágena, pero se encuentran también a lo largo de la región de sobreposición. La superficie libre de los cristales esta rodeada por sustancia básica amorfa. Los iones superficiales de los cristales atraen agua y forman una cubierta de hidratación, que permite el intercambio de iones con el líquido extracelular.

El hueso es una de las sustancias más duras y resistentes del cuerpo. Su dureza y su resistencia se deben a la relación entre los cristales de hidroxiapatita y la colágena. Si el hueso se descalcifica (es decir, pierde todo el mineral), aún conserva su forma original pero se vuelve tan sensible que se puede doblar como una pieza de caucho compacto. Si se extrae el componente inorgánico del hueso el esqueleto mineralizado conservara aún su forma original, pero se volverá extremadamente frágil y podrá fracturarse con facilidad.

Componente orgánico

El componente orgánico, que constituye cerca de 35% del peso seco del hueso consiste en fibras que son casi exclusivamente de colágena de tipo I.

La colágena, la mayor parte de la cual es de tipo I, constituye cerca del 90% del componente orgánico del hueso. Se forma en grandes haces (50 a 70nm de diámetro) que manifiestan la periodicidad de 67um característica. La colágena de tipo I del hueso está muy entrecruzada, lo que impide que se extraiga con facilidad.

El hecho de que la matriz del hueso se tiña con reactivo PAS y manifieste ligera metacromasia indica la presencia de glucosaminoglucanos sulfatados, es decir, de condroitinsulfato y queratán sulfato. Estos glucosaminoglucanos forman pequeñas moléculas de proteoglucano, con núcleos proteínicos cortos con los que se enlazan los glucosaminoglucanos de manera covalente. Los proteoglucanos están enlazados de manera covalente, por medio de proteínas de enlace, con ácido hialurónico, y forman compuestos de agrecán. Sin embargo, la abundancia de colágena hace que la matriz sea acidófila.

Se encuentran también diversas glucoproteínas en la matriz ósea. Estas parecen restringirse el hueso, y son osteocalcina, que se fija a la hidroxiapatita, y osteopontina que también se fija a la hidroxiapatita pero tienen sitios adicionales de fijación en otros componentes, lo mismo que en las integrinas presentes en los osteoblastos y en los osteoclastos. La vitamina D estimula la síntesis de estas glucoproteínas. La sialoproteina ósea otra proteína de la matriz tiene sitios de fijación para los componentes de está y para las integrinas de osteoblastos y osteocitos, lo que sugiere su participación en la adhesión de estas células a la matriz ósea.