BASTONCILLOS. Los bastoncillos, que se activan sólo en la luz mortecina, son tan sensibles que pueden producir una señal a partir de un sólo fotón. Por otra parte, no puede mediar las señales bajo luz brillante, ni tampoco percibir el calor.

Los bastoncillos son células alargadas (50 mm x 3 mm) orientados en paralelo entre sí pero perpendiculares a la retina. Están compuestos por segmentos externo e interno, una región nuclear y una región sináptica (fig. 22-7e)

El segmento externo del bastoncillo, su terminación dendrítica, tiene varios cientos de laminillas membranosas aplanadas orientadas en sentido perpendicular en relación con su eje largo (fig. 22-8t) Cada laminilla representa una invaginación del plasmalema, que se desprende de la superficie celular y, de esta manera, forma un disco. Cada disco está compuesto por un espacio de ocho nanómetros Las membranas contienen rodopsina (púrpura visual), pigmento sensible a la luz.

El segmento interno del bastoncillo está separado del segmento externo por una constricción denominada pedículo de conexíon. A través del pedículo de conexión y hacia el segmento interno del bastoncillo se encuentra un cilio modificado (que carece del singlete central de microtúbulos) que se origina a partir de un cuerpo basal localizado a nivel del extremo apical del segmento interno. Congregados cerca de la interfase con el pedículo de conexión se encuentran abundantes mitocondrias y gránulos citoplásmicos de glucógeno, ambos necesarios para la producción de la energía que requiere el porceso visual. El citoplasma basal en relación con las mitocondria es rico en microtúbulos, polisomas, reticulo endoplasmico liso y RER, y complejos de Golgi. Las proteínas producidas en el segmento interno emigran hacia el segmento externo, en el que se incorporan en los discos. Los discos emigran gradualmente hacia el extremo apical del segmento externo y acaban por desprenderse hacia las túnicas de células pigmentarias, sitios en el que se someten a fagocitosis. El tiempo transcurrido entre la incorporación de preteínas, la migración y la descamación final es menor de dos semanas.

Los bastoncillos inician la fotorrecepción por la luz que entra en el ojo, al absorber la rodopsina, (constituida por la proteína transmembranal opsina ligada al cis-retinal, forma aldehídica de la vitamina A) la luz que entra al ojo. La absorción de la luz produce isomerización de la mitad retinal, que a continuación se disocia de la opsina.

Este blanqueamiento produce opsina activada, que facilita la fijación del trifosfato de guanosina (GTP) a la subunidad a de la proteína G trimérica llamada transducina. El GTP-Ga resultante, activa a la fosfodiesterasa del monofosfato cíclico de guanosina, enzima que cataliza la desintegración del 3’,5’ monofosfato cíclico de guanosina (3’,5’-GMPc). La rodopsina se reemsambla en un proceso que consume energía ayudado por las células de Müller y las células pigmentarias.