El disco óptico, localizado en la pared posterior del ojo, es el sitio de salida del nervio óptico. Como no contiene células fotorreceptoras es insensible a la luz y, por tanto, se llama "mancha o punto ciego" de la retina. A una distancia aproximada de 2.5 mm en relación lateral con el disco óptico, se encuentra una zona pigmentada amarilla en la pared retiniana que se denomina mácula lútea (mancha amarilla). Localizada en el centro de esta mancha se encuentra una depresión oval, llamada fóvea central, en la que es máxima la agudeza visual. La fóvea es una zona especializada de la retina que contiene solo conos, que quedan muy apretados entre sí al desplazarse las otras capas de la retina hacia los lados. Conforme aumenta la distancia desde la fóvea, el número de conos disminuye, en tanto que se incrementa el número de bastoncillos.

La porción de la retina que funciona en la fotorrecepción reviste la superficie interna de la capa de la coroides desde el disco óptico hasta la ora serrata, y está compuesta por 10 capas definidas (figs. 22-5L y 22-6e). Desde el exterior, junto a la coroides hasta el interior, sitio en el que se continúan con el nervio óptico, estas capas son las siguientes:

1. Epitelio pigmentario

2. Capa de bastoncillos y conos

3. Membrana limitante externa

4. Capa nuclear externa

5. Capa plexiforme externa

6. Capa nuclear interna

7. Capa plexiforme interna

8. Capa de células ganglionares

9. Capa de fibras de nervio óptico

10. Membrana limitante interna

Epitelio pigmentario.

El epitelio pigmentario o pigmentado, derivado de la capa externa de la fosita óptica, está compuesto por células cuboideas a cilíndricas (14 mm de ancho y 10 a 14 mm de alto) cuyos núcleos se encuentran en localización basal. Las células están insertadas en la membrana de Bruch, que está localizada entre la coroides y las células pigmentarias. Las mitocondrias son especialmente abundantes en el citoplasma cerca de las numerosas invaginaciones celulares con la membrana de Bruch, lo que sugiere transporte en esta región. En las membranas celulares laterales se encuentran desmosomas, zónulas ocluyentes y zónulas adherentes y constituyen la barrera hematorretiniana. Mas aún, las uniones comunicantes o de intersticio sobre las membranas celulares laterales permiten la comunicación intercelular. Los ápices de las células manifiestan microvellosidades y estructuras a manera de manguitos que rodean a las puntas de las células fotorreceptoras. Como estas extensiones a manera de manguitos rodean simplemente a las puntas de los bastoncillos y los conos fotorreceptores, las sacudidas violentas repentinas pueden sacarlos de su sitio, lo que dará por resultado desprendimiento de la retina, causa común de ceguera parcial.

El aspecto mas distintivo de las células pigmentarias es su abundancia de gránulos de melanina, que sintetizan estas células y almacenan en sus porciones apicales. También en esta localización se encuentran las puntas diferidas en parte de los bastoncillos. Por añadidura abundan en el citoplasma retículo endoplásmico liso, retículo endoplásmico rugoso (RER) y aparato de Golgi.

El epitelio pigmentario tiene varias funciones. Las células epiteliales pigmentarias absorben la luz después que ésta ha pasado por los fotorreceptores y los ha estimulado, con lo que impide el reflejo desde estas túnicas, que trastornaría el enfoque. Estas células pigmentarias fagocitan de manera continua a los discos membranosos gastados de las puntas de los bastoncillos fotorreceptores. Las células epiteliales pigmentarias desempeñan también una función activa en la visión al esterificar a los derivados de la vitamina A en su retículo endoplásmico liso.