CORPUSCULO RENAL
El corpúsculo renal, estructura redonda a oval que mide 200 a 250 µm de diámetro, está compuesto por un mechón de capilares, el glomérulo, que se invagina en la cápsula de Bowman, que es el extremo proximal dilatado y en forma de saco de la nefrona (figs. 19-1eC, 19-2L, 19-3L y 19-4e). Durante el desarrollo los capilares quedan revestidos por el extremo ciego de la nefrona tubular, casi como si hubiera una mano empujando sobre el extremo de un globo expandido. De aquí que esté disminuido el volumen del espacio interno de la cápsula de Bowman, que se conoce como espacio de Bowman (espacio urinario). El glomérulo se encuentra en contacto íntimo con la capa visceral de la cápsula de Bowman, compuesta por células epiteliales modificadas denominadas podocitos. La pared externa que rodean al espacio de Bowman, compuesto por células epiteliales escamosas simples (que se asientan sobre una lámina basal delgada) es la capa parietal (fig. 19-4e).
La región en la que los vasos que riegan y drenan el glómerulo entran en la cápsula de Bowman y salen de ella se conoce como polo vascular. La región de continuación entre el corpúsculo renal y el túbulo proximal, que drenan al espacio de Bowman, se denomina polo urinario. El glomérulo se encuentra regado por una arteriola glomerular aferente recta y corta, y lo drena la arteriola glomerular eferente. De aquí que el glomérulo tenga un lecho capilar totalmente arterial. Aunque el diámetro externo de la arteriola eferente es mayor que el de la arteriola eferente, sus diámetros luminales son aproximadamente iguales.
La arteriola glomerular eferente presenta mayor resistencia al flujo de sangre, lo que da por resultado presiones capilares más elevadas en el glomérulo que en los otros lechos capilares. El filtrado que escurre desde el glomérulo entra en el espacio de Bowman a través de una barrera de filtración compleja, compuesta por la pared endotelial del capilar, la lámina basal y la capa visceral de la cápsula de Bowman.
GLOMÉRULO. El glomérulo está formado por varios mechones de capilares anastomosantes que se originan en ramas de la arteriola glomerular eferente. El componente de tejido conectivo de la arteriola aferente no entra en la cápsula de Bowman, y las células normales de tejido conectivo están sustituidas por células especializadas conocidas como células mesangiales. Son 2 los grupos de células mesangiales, las extraglomerulares, localizadas en el polo vascular y las intraglomerulares situadas dentro del corpúsculo renal (fig. 19-5e y 19-6t).
Las células mesangiales intraglomerulares son, probablemente, fagocíticas y fincionan en la resorción de la lámina basal. Las células mesangiales pueden ser también contráctiles, porque tienen receptores para los vasocontrictores como la angiotensina II y, por tanto, reducen el flujo de sangre a través del glomérulo. Más aún, pueden soportar a los capilares del glomérulo en las regiones en las que la capa visceral de la cápsula de Bowman no entra en contacto con los capilares.
Los capilares que constituyen el glomérulo son semejantes a los capilares del tipo fenestrado (figs. 19-5e, 19-6t y 19-7e). Sus células endoteliales están muy atenuadas, con excepción de la región que contiene al núcleo, pero los poros no suelen estar cubiertos por un diafragma. Los poros son de gran tamaño, y su diámetro varía entre 70 y 90 nm; de aquí que estos capilares actúen como barrera sólo para los elementos figurados de la sangre y las macromoléculas cuyo diámetro real exceda al de las fenestras (p. Ej., albúmina 69 000 Da).
LÁMINA BASAL. El glomérulo está revestido por una lámina basal, de cerca de 300 nm de espesor, constituida por 3 capas (figs. 19-6t y 19-7e). La capa densa media, llamada lámina densa, mide unos 100 nm de espesor y está constituida por colágena del tipo IV. A cada lado de la lámina densa se encuentran capas electródensas, las láminas raras, que contienen laminina, fibronectina y proteoglucano polianiónico rico en heparán sulfato. Algunos investigadores se refieren a una lámina rara interna, entre las células endoteliales del capilar y las de la lámina densa, y a una lámina rara externa, entre la lámina densa y la capa visceral de la cápsula de Bowman. Fibronectina y Laminina ayudan a los pedículos y a las células endoteliales a conservar su inserción contra la lámina densa.